El proyecto fotográfico cámara en mano nace por si mismo,. Desde que tengo recuerdo, la fotografía de paisaje y arquitectura era mi favorita, muchísimo antes de convertirla en mi profesión. Una fotografía que hacía improvisada, en tránsito, de viaje, a veces por sorpresa.. Durante el día a día de mi trabajo, los encargos de fotografía de arquitectura e interiores requieren, como es lógico, una gran cantidad de material: trípodes, varias lentes, cuerpos de cámara e iluminación de apoyo entre otras cosas, y de tiempo,. bastante tiempo. Tiempo de preparación, de reflexión y de estudio de los puntos de vista.
Cámara en mano es un reencuentro entre la fotógrafa profesional y esa niña que viajaba con la cámara de papá. Viajo con mi cámara (mi camarote, como digo yo) y una lente (cada vez elijo una). Nada más, sin trípode, sin flash, sin nada. El objetivo es descubrir los lugares a través de la lente, fluir. En los reportajes cámara en mano importa más la sensación que la tecnicidad, no importa si hay grano, no importa si algo está torcido, no importa si hay mucho contraste de luz. todo eso ya lo arreglaré (es lo que suelo pensar). Importa ejercitar la mirada, la velocidad, la espontaneidad, salir de la zona de confort.